Recordando a mi entrañable y tocayo, Antonio Machado, desde mi modesta percepcion de lo que hoy puede ser un buen sueño , ojala mañana sea una realidad, me atreví a hacer mios unos versos del maestro.
Anoche cuando dormía,
soñé bendita ilusión,
que Mariano dimitía,
y el PP se derretía,
como un hielo expuesto al sol.
Anoche cuando dormía,
soñé bendita ilusión,
que PSOE no existía,
y nadie recordaría,
que alguna vez existió.
Anoche cuando dormía,
soñé bendita ilusión,
que el IVA ya no subía,
y la Merkel nos pedía,
para evitar la recesión.
Anoche cuando dormía,
soñé bendita ilusión,
que era dios quien castigaba,
al político ladrón,
y como brujas pasaban,
por la Santa Inquisición.
Pero hoy al despertarme,
al ver la televisión,
recordé lo de Quevedo,
que los sueños, sueños son,
y como no haya pa carne,
habrá una revolución.
No hay comentarios:
Publicar un comentario